Donde habite el olvido,
En los vastos jardines sin aurora;
Donde yo sólo sea
Memoria de una piedra sepultada entre ortigas
Sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.
Donde mi nombre deje
Al cuerpo que designa en brazos de los siglos,
Donde el deseo no exista.
En esa gran región donde el amor, ángel terrible,
No esconda como acero
En mi pecho su ala,
Sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento.
Allí donde termine este afán que exige un dueño a imagen suya,
Sometiendo a otra vida su vida,
Sin más horizonte que otros ojos frente a frente.
Donde penas y dichas no sean más que nombres,
Cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo;
Donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo,
Disuelto en niebla, ausencia,
Ausencia leve como carne de niño.
Allá, allá lejos;
Donde habite el olvido.
En los vastos jardines sin aurora;
Donde yo sólo sea
Memoria de una piedra sepultada entre ortigas
Sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.
Donde mi nombre deje
Al cuerpo que designa en brazos de los siglos,
Donde el deseo no exista.
En esa gran región donde el amor, ángel terrible,
No esconda como acero
En mi pecho su ala,
Sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento.
Allí donde termine este afán que exige un dueño a imagen suya,
Sometiendo a otra vida su vida,
Sin más horizonte que otros ojos frente a frente.
Donde penas y dichas no sean más que nombres,
Cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo;
Donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo,
Disuelto en niebla, ausencia,
Ausencia leve como carne de niño.
Allá, allá lejos;
Donde habite el olvido.
Luis Cernuda es un reconocido homosexual que pertenece a la generación del 27. De su
estancia en Francia surgió Donde habite el olvido (1934), que es en
realidad un libro el cual trata sobre un amor desgarrador. Esto se corresponde
con el tema principal del poema: el dolor amoroso como causa de su desesperación
por olvidar y estar ausente.
Cernuda habla sobre el dolor que padece por ese sentimiento
que le corrompe. Piensa en que es mejor desaparecer y no sentir nada ni desear
nada, hasta tal punto que se podría parecer que busca su muerte.
En la primera estrofa Cernuda busca ese olvido en un lugar
oscuro y apartado, un lugar. Este lugar lo representa como un extenso jardín
donde no hay día, sólo hay oscuridad. El busca ese lugar porque así
puede ser como la piedra: vacío de mente e insensible ante el daño del
exterior.
En la segunda estrofa menciona su intención de abandonar su
cuerpo sin que le sucumba el poder de desear.
En la tercera estrofa nos dice que siente como si ese amor
fuera el ala de cupido atravesándole el corazón como una navaja afilada
mientras este le sonríe socarrón gozando de su dolor.
En la cuarta nos explica el motivo de ese sentimiento:
porque aquella persona a quien ama busca en él alguien que no es. Y que para estar con
el tendría que cambiarse a sí mismo, cosa que no pretende hacer.
En la quinta estrofa nos vuelve a mencionar el olvido. Que
las penas y alegrías sean cosas del pasado. El recuerdo de la infancia, la
inocencia y la niñez antes de desaparecer en el olvido.
Como vemos el poeta a utilizado una estructura circular
donde la primera parte se correspondería con la primera y segunda estrofa, la
segunda con la tercera y cuarta estrofa y la tercera con la quinta y última
estrofa que hace referencia a las dos primeras.
Podemos ver que se repite varias veces la palabra “Donde”,
que aparece en todos los primeros versos de todas las estrofas a excepción de
la última, que aparece en el segundo verso. Además comienza y termina con la
misma oración acentuando aún más su perfecta estructura. Aparecen antítesis: “…donde el amor, ángel terrible…” (para
el poeta el amor es hermoso como el ángel y doloroso como ser terrible) “cielo y tierra”, “penas y dichas”; metonimias:
“Memoria de una piedra sepultada entre
ortigas…”, personificaciones: “Sobre
la cual el viento escapa a sus insomnios”; y anáforas entre otras figuras: “donde”
y “allá” que resaltan el deseo del autor de huir del dolor.
Cernuda expresa en este poema de forma un tanto enrevesada y
muy elaborada su situación amorosa. Este estilo en su forma de redactar se debe
a la influencia del surrealismo. Esta corriente defendía el conocimiento más allá
de lo racional, es decir, a través del subconsciente.
En cuanto a lo expresado en el poema, una vez desentrañamos
lo que nos quiere comunicar, Cernuda nos habla de una situación con un hombre
a quien él ama. Esta hombre intenta hacerle cambiar y lo que nos quiere decir el
poeta es que él no quiere cambiar, pero que la ama tanto que le hace sentirse
mal llevandole al dolor y alas ganas de dejar de sentir de olvidarlo todo.
Todos o casi todos nos habremos enamorado profundamente de
una persona, y tal vez nos hayamos topado incluso con una persona que nos haya
querido cambiar algo de nosotros mismo cuando se supone que si estas con
alguien y la quieres, la quieres tanto en la bueno como en lo malo. ¿No?
Existen varias canciones hablando de este mismo tema pero
que, personalmente, destacaré la siguiente por estar muy relacionada con el
tema que nos expone Luis Cernuda: Contigo de Joaquín Sabina
En esta canción Sabina expresa que no quiere mantener una relación
tradicional. No quiere sentirse ligado a una persona pero tampoco estar
separado de ella. Pero lo que sí merece especial mención es cuando dice 'ni
contigo ni sin ti', es decir, que no quiere que su relación con ella le fuerce
a tener que elegir entre una u otra cosa. En definitiva, Joaquín Sabina busca una
relación basada en el amor en sí y no en ataduras.
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